Trucos para tratar con los clientes realmente agrios

Trucos para tratar con los clientes realmente agrios

9 enero, 2018 1 Por admin
Los clientes constituyen el elemento clave para toda empresa, pero no siempre tienen la razón. Eso sí, teniendo en cuenta que sin ellos no hay ni ventas ni ingresos, aunque no tengan la razón siempre hay que dársela la mayoría de las veces, o nuestra empresa se vea perjudicada. Por ese motivo se debería contar con personal preparado para saber lidiar con los diferentes tipos de clientes que acudan a nuestra empresa. Por regla general, es conveniente dar al cliente siempre una salida honorable a una situación tensa.

Para estar preparado ante situaciones en las que tengas que tratar con un comprador molesto proponemos varias estrategias que te ayudaran a manejar la situación y lograr los mejores resultados:

 

No interrumpas al cliente mientras está hablando

Un sabio consejo: “mantener los oídos atentos antes que la boca repleta de disculpas“.  Un cliente enfadado necesita ser escuchado. Si conseguimos que exprese sus preocupaciones y discrepancias sin interrumpirle, el cliente se sentirá más comprendido y, por lo tanto, más calmado, matando dos pájaros de un tiro. Una vez que se ha dejado que se desahogue, habrá que encontrar el momento adecuado para hablarle y ofrecerle una solución, evitando por todos los medios ponerse a la defensiva.

 

Imagina que no estáis solos

Un pequeño truco mental realmente efectivo: cuando la situación se está poniendo difícil, imagina que hay más clientes mirando. Al pensar en la gran cantidad de clientes potenciales que podemos llegar a perder por una mala atención, se consigue mantener los nervios y el control de la situación, generando confianza total ante nuestro cliente.

 

Ponte en el lugar de quien reclama y muestra que le entiendes

Mostrar empatía es una técnica que funciona.  Si el cliente detecta que te estás identificando con su problema, que lo entiendes, harás que sea más receptivo a tu explicación. De esta forma sentirá que quieres ayudarlo.

 

Nunca lo tomes de manera personal, aunque así lo sea

Jamás hay que llevar las críticas al lado personal.  Si el que lo hace es el cliente, hay que ignorar los comentarios y retomar el tema que ha provocado que el cliente esté molesto. Hay que saber que insultándote, los clientes están volcando su frustración sobre ti; pero realmente no te conocen, sus críticas carecen de fundamento.

 

Cumple con tus promesas

Si has prometido que llamarías a tu abogado para solucionar un asunto, que le avisarías de un cambio en las condiciones de venta, que le aplicarías un descuento sobre un trabajo de imprenta, etc..tienes que hacerlo.  Al cumplir con nuestras promesas, el cliente se siente atendido. De no hacerlo, el cliente puede volver mucho más enfadado que la primera vez, porque tiene además otro motivo para hacerlo: no cumpliste tu palabra.

Por último, recuerda que para manejar clientes “agrios”, la mayor virtud es la paciencia, como dijo William ShakespeareSi después de todo lo que estás haciendo y de tus esfuerzos, el cliente no se siente satisfecho, solo te queda rendirte y darle lo que quiere. Pero recuerda, tu dignidad también es importante, muchas veces decirle a cara a un cliente desagradable que es un incordio y que no quieres seguir trabajando con él es un auténtico placer. Te lo digo por experiencia.